Aprovechando que el huerto está repleto de berenjenas, vamos a preparar una receta que gusta a todo el mundo. Lasaña de berenjenas con carne y queso.
Utilizaremos una carne mixta de buena calidad, mejor si es recién picada y una salsa base de tomate que a menudo tenemos de reserva en el armario.
Puedes comprar berenjenas durante todo el año, aunque su mejor temporada es en verano, las salteas, fríes, asas… y preparas con ella un sinfín de recetas, como las Berenjenas en escabeche de miel.
Preparar este plato ya es una gozada en sí, las berenjenas marcadas a la plancha van creando capas doradas que se mezclan con la salsa de tomate, para terminar en el horno gratinando el queso rallado.
Esta receta es una buena opción, ya que a los niños les encantará, también es ideal si la vas a llevar al trabajo. Podrás prepararla directamente en un táper de cristal adecuado para horno y así llevarla sin tener que cambiar de recipiente.
Prepara comidas en casa y luego cómelas en el trabajo, la escuela o el gimnasio. Puede cocinar la comida directamente en los recipientes, luego guardar y recalentar.
Lasaña de berenjenas
Cómo preparar Lasaña de berenjenas. Sigue paso a paso la receta de este plato sencillo de preparar, que puedes preparar con antelación y que es ideal para niños y para llevar al trabajo.
Ingredientes
Elaboración
Para la lasaña
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Lavamos las berenjenas, las pelamos para que sea más cómodo si van a comer niños, y las partimos en rodajas de 1/2 centímetro de grosor.
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Las ponemos en agua con sal y las colocamos en un recipiente tapado en la nevera.
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Pelamos y picamos la cebolla y los ajos, los freímos con un poco de aceite y los añadimos a la salsa base de tomate junto con un poco de orégano.
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En una sartén con un poco de aceite caliente freímos ligeramente la carne salpimentada. La incorporamos a la salsa de tomate.
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Enjuagamos las berenjenas, las secamos y las pasamos por la plancha con un poco de aceite. Las vamos poniendo en un recipiente apto para horno, previamente engrasado y alternando capas de berenjena con capas de salsa de tomate y carne.
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Cubrimos con bechamel y mozzarella y horneamos durante 30 minutos a 200º.
Para la bechamel:
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En un cazo derretimos las mantequilla y la mezclamos con la harina hasta que se forme una pasta. Vamos incorporando la leche caliente poco a poco y moviendo con unas varillas. Añadimos sal, pimienta y nuez moscada.